14 de mayo de 2021
Queridas y queridos amigos:
¡Feliz Día del Maestro!
Quiero felicitar con afecto a todas las maestras y maestros en esta fecha que celebra la vocación más importante de todas: despertar consciencias, ilustrar conocimiento y guiar a la mente de los jóvenes entre los misterios del universo.
Se dice que la religión es una cultura de fe y la ciencia es una cultura de duda. Por eso los maestros sentimos un desafío siempre renovado cuando participamos en la curiosidad e inventiva de nuestros alumnos. Nos da la oportunidad de crear recrearnos en el conocimiento. Nos permite dudar categóricamente y, como decía el maestro Descartes, elevarnos sobre los cimientos de nuestros paradigmas.
Enseñar nos envuelve en una dinámica providencial en el tiempo. Por un lado, el conocimiento siempre es providencia por mas que derive de la adversidad. Benjamin Franklin decía “dime algo y lo olvidaré; enséñame algo y lo recordaré; involúcrame en algo y aprenderé”; porque el verdadero conocimiento se almacena en los libros, pero emana de la experiencia. Por otro lado, Malcom X decía que “la educación es el pasaporte al futuro; porque el mañana pertenece a las personas que están preparadas para el hoy” y nos recuerda que el tiempo es el gran igualador de la humanidad. Los ricos no pueden comprar mas segundos; y los pobres tienen la misma cantidad del recurso más preciado de todos. Los maestros optimizamos el tiempo de vida y podemos reducir lecciones que tardarían décadas en ser aprendidas, en un segundo de experiencia bien vivida. El maestro viaja en el tiempo y nos libera de la oscuridad de la ignorancia.
Felicito a mis colegas maestros en este día tan importante. Desde el año de 1994 soy profesor de la UNAM, Campus Aragon. Y desde que comencé mi camino como alumno (Generación 82-85) aprendí que un instante en el aula adecuada podía ser una vida entera para los que no tuvieron el privilegio de escuchar a los juristas más distinguidos de su época compartiendo, acompañando y brillando con la luz de su conocimiento.
¡Celebramos su vocación y su trascendencia!
¡Muchas felicidades!
Rafael Guerra Álvarez