Ciudad de México, 11 de marzo de 2020

El trabajo en el hogar se considera una aportación económica, afirmó el juez de Proceso Oral Familiar del Poder Judicial de la Ciudad de México, Eduardo García Ramírez, quien advirtió que, en caso de divorcio, la persona que lo ejerció tiene derecho a 50 por ciento de lo que la pareja obtuvo saliendo a trabajar.
En entrevista en el programa Café Capital, de Capital 21, conducido por Alejandra Gallardo, se refirió a temas de violencia económica en el seno del hogar, y subrayó que no aportar recursos, no pagar la pensión alimenticia es una manera “muy fuerte” de dominio sobre la pareja.
“¿Qué hace la mujer si le cortan los ingresos o los recursos para sostener a sus propios hijos? Qué situación más difícil para cualquier ser humano”, cuestionó.
García Ramírez comentó que el trabajo en el hogar implica de 18 a 20 horas diarias con una “responsabilidad tremenda” durante los siete días de la semana, por lo que aseguró que no resulta justo que en una separación la pareja se quede con todo el patrimonio.
Por otra parte, se refirió al tema de la pensión alimenticia; explicó que hay parámetros de acuerdo a las necesidades y posibilidades, y que al final es el juez familiar el que la fija de manera justa.
“La pensión no es lo que la persona quiera dar, no es lo que el proveedor quiera dar”, aclaró.
Por un lado, puntualizó, están los parámetros de quien debe dar la pensión y las necesidades del que debe recibir, y descartó que el pago de alimentos se base en porcentajes ya establecidos: 20 por ciento para un hijo y 35 por ciento si son dos.
“La pensión debe ser lo necesario para cumplir con todos los requisitos de educación, vestido, alimentación, médico y medicinas, y que sean suficientes de acuerdo al nivel socioeconómico que tengan los acreedores, pero sin un afán de lujo”, concluyó.