Ciudad de México, 06 de marzo de 2020

En el marco de la conmemoración del Día del Juzgador Mexicano, el presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México, magistrado Rafael Guerra Álvarez, afirmó que si bien la justicia es ciega para ella no hay invisibles.

En el auditorio Benito Juárez, destacó que celebrar la identidad del juez mexicano es, a la vez, celebrar su abnegada labor de entrega, disciplina, así como sus virtudes cardinales de sabiduría, fortaleza, templanza y prudencia.

Con la presencia de impartidores de justicia integrantes del Colegio de Jueces del Fuero Común de la Ciudad de México, cuya presidenta es María de los Ángeles Rojano Zavalza, Guerra Álvarez enfatizó la importancia de defender “nuestra autonomía, la soberanía de nuestros fallos y la independencia de nuestra deliberación.

Recordó a los jueces que los impartidores de justicia están llamados a dar lo mejor de sí mismos, y demostrar así que el Poder Judicial es imprescindible para la vida social.

Les expresó su fe incondicional, y les recordó que la institución invierte recursos en una nueva oferta académica para continuar con la inercia de especialización, a la que consideró vital para el orden jurídico actual.

“La implementación de la oralidad y las tecnologías de la información enriquecen nuestra labor y demandan de nosotros mismos más preparación y más especialización”, comentó.

En el acto se entregaron reconocimientos por su labor a los jueces Evangelina Díaz Abascal, Minerva Martínez Cisneros, Alejandro Beltrán Torres, Yolanda Morales Romero y a José Luis de Gyves Marín.

Estuvieron presenten los académicos Sara Santillán Flores, Carlos Santana Ortega, Luis Yudico Colín, Rodolfo Bucio Estrada, Gabriel Moreno Sánchez y David Aboites.